Como ya hemos dicho en repetidas ocasiones, revisar el coche tal y como merece es algo fundamental si queremos alargar su vida útil. Además, también entran en juego otros factores externos como el circuito habitual sobre el que conduzcamos o nuestro modo de conducción. Uno de los aspectos que sufren directamente por nuestra manera de conducir puede ser, por ejemplo, el sistema de frenos. Este sistema es fundamental para la seguridad ya que es el que permite detener el coche por completo por lo que si estos fallan… posiblemente nos veamos envueltos en un accidente.
Como no queremos que esto suceda y nuestro objetivo es que el sistema de frenado de nuestro coche esté siempre a punto, hoy en Blog Autingo hablaremos sobre este y sobre cuándo hay que revisarlo. ¡Presta atención!
¿Cuál es la función del sistema de frenos?
Este sistema es clave junto a los neumáticos y los amortiguadores, por lo que hay que tener muy clara cuál es su función. Su trabajo es desacelerar y disminuir la velocidad de un vehículo hasta el punto de detenerlo por completo. Esto ocurre al accionar el pedal, que las almohadillas de frenos comprimen los rotores unidos a las ruedas y, debido a la fricción, el coche comienza a perder velocidad.
Por tanto, como puedes ya intuir, el sistema de frenos está compuesto por distintas piezas que, como en un engranaje, cada una cumple su misión para llegar al objetivo último: desacelerar o detener el coche.
¿Qué se debe comprobar?
A continuación, detallamos los distintos componentes que se deben comprobar para asegurarnos de que todo está en orden y podemos conducir tranquilos.
- Pastillas de freno: es recomendable revisarlas cada 10.000 kilómetros y sustituirlas cuando su espesor sea inferior a 2mm. Estas son las que proporcionan la fricción que necesitan los discos de freno para que cuando accionemos el pedal el coche se detenga.
- Discos de freno: se deben cambiar cuando su espesor sea inferior al recomendado por el fabricante. También si su color o aspecto indican algún tipo de deterioro que comprometa su adecuado funcionamiento.
- Líquido de frenos: la falta de líquido puede indicar un problema en el sistema. Por tanto, hay que revisar el desgaste del conjunto de frenos y si hay algunas manchas en el tambor de freno que puedan indicar una posible fuga. Si todo está en orden, procederemos a rellenar el líquido hasta alcanzar el nivel recomendado.
- Latiguillos: se debe revisar su aspecto y buscar si hay zonas cuarteadas que puedan degenerar en una rotura.
En Autingo puedes pedir cita para acudir al taller que prefieras y revisar el sistema de frenos.
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